sábado, 21 de junio de 2008

A MENOS QUE CAMBIE LA ESCUELA...

Luego de recorrer todo lo leído, analizado, estudiado y reflexionado desde el inicio de la Diplomatura, decidí centrarme en un artículo que, desde lo leí por primera vez me “golpeó” fuertemente:
"De cómo la tecnología no logra integrarse en la escuela a menos que…. cambie la escuela" Begoña Gros, Universidad de Barcelona, bgros@ub.edu

En libro titulado “El ordenador invisible” sostenía la necesidad de dejar de centrar nuestra mirada en las máquinas para plantearnos el tipo de educación más adecuada y conseguir que haya una verdadera apropiación de la tecnología, que los ordenadores se conviertan en herramientas tan cotidianas como los lápices, los bolígrafos y los libros que ocupan espacio en nuestras aulas. En el libro, se recogían algunos estudios en los que se demostraba la poca integración real de las tecnologías en la escuela. La escritura del libro finalizo en 1998, o sea que han pasado seis años desde
su elaboración. Durante este tiempo, los avances tecnológicos han seguido siendo muy importantes y la incorporación y acceso a la red se ha extendido de forma notable. Sin embargo, son pocos los matices que se pueden agregar al diagnostico realizado en aquel momento...”
Al día de hoy han transcurrido cuatro años más (diez desde que fuera escrita la presentación del libro mencionado) ¡y seguimos igual!...o, tal vez peor... habría que pensarlo... Pero ya abordaremos esto con mayor detalle.

En este trabajo, su autor intenta:
·1.- Analizar el modo de mejorar la educación,
·2.- Reflexionar sobre cómo se podría avanzar en la incorporación adecuada de la tecnología en la escuela y
·3.-Repensar cómo una adecuada difusión de experiencias y prácticas exitosas podrían actuar como estímulo y, yo agregaría, como elemento de contagio saludable y trabajo colaborativo entre docentes...
·4.-Explicitar la simpleza de las reformas educativas del siglo XX y plantea cómo la inclusión de las TIC ha reabierto muchos debates sobre las formas más apropiadas de enseñanza y sobre cómo los medios son un soporte para el aprendizaje.
Al respecto dice textualmente: “Las TICs han contribuido a desarrollar nuevas metodologías de trabajo y también han servido para recuperar viejas propuestas que en su momento no encontraron los medios o el contexto social propicio en el que desarrollarse. Sin embargo, no siempre el uso de la tecnología conduce a la innovación y la reflexión sobre el aprendizaje...” ...”La sociedad de mediados del siglo XX y la sociedad actual poco tienen que ver y las necesidades educativas y formativas son muy diferentes...”

5.-Señalar las diferencias sustanciales entre los modos de obtener el conocimiento en la Sociedad Industrial y en las Sociedad de la Información.

6.-Analizar cómo varió la incorporación del conocimiento y qué ocurrió e este aspecto en la escuela. Al respecto, me impactó un ejemplo, por lo cual lo transcribo:” Imaginemos que hace un siglo hubiésemos congelado a un cirujano y a un maestro y ahora les volviéramos de nuevo a la vida. El cirujano entraría en la sala de operaciones y no reconocería ni el lugar ni los objetos y se sentiría totalmente incapacitado para actuar. ¿Qué pasaría con el maestro?. Seguramente reconocería el espacio como una clase y todavía encontraría una tiza y una pizarra con la cual empezar a enseñar.” ¡Qué claridad y simpleza! ¡Es maravilloso!

Reconoce y señala una serie de problemas que se presentan en la inclusión de las NT
Entre ellos menciona:
a) Enfoques educativos ajenos a las necesidades de los niños y jóvenes actuales y con el tipo de sociedad en que vivimos y vivirán los niños que hoy se están formando. Como afirma Morin (1999), la enseñanza actualmente ha de convertirse en una enseñanza educativa; “no se trata de transmitir el puro saber, sino una cultura que permita entender nuestra condición y ayudarnos a vivir. El reto de la globalidad es también el reto de la complejidad”(...)
b) La compartimentación de saberes por disciplinas, horarios, etc. “...aprendemos a aislar objetos, separar disciplinas, disolver problemas y no a relacionar e integrar. Se hace difícil, especialmente para los niños, aprender a contextualizar el saber. La escuela actúa en un sentido inverso al desarrollo actual de la sociedad “no es el lugar de movilidad del conocimiento, sino el lugar en el que algunos conocimientos son transmitidos y clasificados. El lugar en el que los conocimientos se hacen sedentarios, envejecen y se hacen estáticos” (Simone,2001: 41)
c) La soledad de los docentes frente a los cambios en la tarea de enseñar y la incorporación de modificaciones necesarias dependiendo sólo del voluntarismo de cada profesor. Respecto al modo en que nos “formamos para enseñar” hace hincapié en que esa soledad que permite aventurarse en la creación y la innovación es, simultáneamente, su mayor dificultad: provoca cansancio, priva del apoyo y del estímulo de sus pares y no favorece el trabajo colaborativo. Plantea la necesidad de redefinir el trabajo docente y la currícula escolar: “Bajo esta perspectiva, el papel del profesor debería de cambiar desde una concepción puramente distribuidora de información y conocimiento hacia una persona que es capaz de crear y orquestar ambientes de aprendizaje complejos, implicando a los alumnos en actividades apropiadas, de manera que los alumnos puedan construir su propia comprensión del material a estudiar, y acompañándolos en el proceso de aprendizaje.”

Finalmente Begoña Gros concluye que ” sólo puede integrarse la tecnología si cambiamos las metodologías de aprendizaje y, por supuesto, se revisan muchos de los contenidos del currículo.” Pero, para ello es imprescindible solucionar al menos siguientes temas:
1. Ordenadores en las aulas en lugar de aulas con ordenadores
2. El valor añadido de las actividades: un cambio metodológico
3. Los cambios solitarios, cansan.
4. Crear, compartir, difundir “ Un modelo docente centrado en el estudiante requiere, por parte del profesor, de una mayor variedad de materiales y, por tanto, debe trabajar en red y en la red.”
5. Formación técnica y metodológica: “La formación técnica sigue siendo importante,(...) se precisa una mayor profundización en métodos didácticos sin confundir el método con los recursos disponibles para un determinado contenido”.
6. Aprovechar el conocimiento de los estudiantes.


Para concluir, quisiera compartir con Uds un par de frases que me impactaron y me gustaría que, juntos , sigamos pensando, desgranando:



    Las reformas educativas que se han ido sucediendo a lo largo del tiempo han introducido soluciones simples para problemas complejos (...) Formamos a ciudadanos del siglo XXI con un currículo del siglo XIX y pretendemos utilizar las tecnologías más avanzadas, evidentemente resulta incompatible”.


    El desarrollo de las redes supone un proceso evolutivo en el que la innovación y el aprendizaje es un aspecto central. El reto actual es que no sólo tienen que aprender los estudiantes sino las propias escuelas.”


lunes, 9 de junio de 2008

Enseñar es más difícil que aprender...

"Navegando" entre edublogs descubrí uno con artículos generales muy interesante: "Educar en Tiempos de la Diversidad" de Jaime Valdés (.http://www.jaimevaldes.cl/?p=99). Pero uno de ellos me sorprendió gratamente y creí muy bueno compartirlo con Uds.


“Enseñar es más difícil que aprender. Se sabe esto muy bien, más pocas veces se lo tiene en cuenta. ¿Por qué es más difícil enseñar que aprender?
No porque el maestro debe poseer un mayor caudal de conocimientos y tenerlos siempre a disposición.
El enseñar es más difícil que aprender porque significa: dejar aprender. Más aún: el verdadero maestro no deja aprender nada más que “el aprender”.
Por eso también su obrar produce a menudo la impresión de que propiamente no se aprende nada de él, si por “aprender” se entiende nada más que la obtención de conocimientos útiles. El maestro posee respecto de los aprendices como único privilegio el que tiene que aprender todavía mucho más que ellos, a saber: el dejar-aprender. El maestro debe ser capaz de ser más dócil que los aprendices. El maestro está mucho menos seguro de lo que lleva entre manos que los aprendices.
De ahí que, donde la relación entre maestro y aprendices sea verdadera, nunca entra en juego la autoridad del sabiohondo ni la influencia autoritaria de quien cumple una misión.
De ahí que siga siendo algo sublime el llegar a ser maestro, cosa enteramente distinta de ser un docente afamado. Es de creer que se debe a este objetivo sublime y su altura el que hoy en día, cuando las cosas se valorizan solamente hacia abajo y desde abajo, por ejemplo, desde el punto de vista comercial, ya nadie quiera ser maestro”.
Extracto de la primera lección del libro “¡Qué significa pensar?” de Martín Heidegger (Buenos Aires, Editorial Nova, 1964)

domingo, 1 de junio de 2008

PENSANDO EN LA WEB 2.0

En el transcurso de esta sesión de la Diplomatura en Educación y Nuevas Tecnologías (FLACSO), he tenido que leer una serie de textos sobre las críticas a la Web 2.0 y, dicha lectura me llevó a una reflexión que deseo compartir con Uds.


Parto de las siguientes aseveraciones. Si "La Web es un experimento social masivo" (Lev Grossman, en la revista Time del 13-12-2006) e "Internet no es un medio sino un ecosistema" (Joel de Rosnay, 200.6) debiéramos pensar que, por un lado, estamos siendo protagonistas de una experiencia inédita cuya repercusión en la cultura y en la sociedad son aun desconocidas y, por el otro, se podría suponer que si Internet es realmente un ecosistema tendería, - con el correr del tiempo- a lograr un equilibrio.



Sin embargo, no necesariamente ni todo lo masivo es "bueno" ni todo sistema se equilibra... Además, en la masividad a la que alude L. Grossman, ¿qué actores sociales intervienen? ¿Para qué y por qué lo hacen? El ecosistema, ¿será capaz de lograr autoequilibrarse?...



Simplificando un poco la cuestión podríamos pensar en las ventajas y desventajas que implica esta masividad en el medio del que hablamos.



1.- Facilitación en el acceso y en la publicación de multiplicidad de contenidos, conceptos e ideas, es decir; democratización de la cultura. Así planteado, ¿quién podría oponerse a ello? Sin embargo,¿es verdaderamente factible? ¿Quiénes serían los actores sociales que harían sus aportes? ¿Para qué actores lo harían? ¿Podemos afirmar que todos quienes tendrían acceso a dichos contenidos, conceptos e ideas son verdaderos "lectores digitales"? " (...), se requiere de una alfabetización digital profunda (es decir; nuevamente acceder, administrar, integrar, evaluar y crear información), para no resultar confundidos en un entorno de gran escasez de atención. (...)Aunque se cuenta con grandes posibilidades de comunicación, se vive, se piensa y se escribe en formato beta, un tipo de pensamiento de corto alcance que dificulta distinguir entre conocimiento y ruido. MÁS INFORMACIÓN CON MENOS RIGOR ES IGUAL A MAYOR CONFUSIÓN. En tal sentido, LA PRINCIPAL DESTREZA QUE LA EDUCACIÓN EN LOS PAÍSES DESARROLLADOS DEBE ENTREGAR A LOS INDIVIDUOS, ES LA CAPACIDAD DE FILTRAR CONTENIDOS, ANTE UN PANORAMA DE EXTREMA REDUNDANCIA INFORMACIONAL." (A. Piscitelli en el prólogo de "Inteligencia Colectiva o Medios Fast Food") ¿De qué modo se podría garantizar, sin perder la democracia, la no repercusión de los bullshit?


2.- Posibilidad de dar a conocer la opinión de diversos actores sociales, con lo cual no sería solamente la historia oficial la única historia conocida... Sin embargo, aunque valoro esa posibilidad, me pregunto: En el mundo en que vivimos y teniendo en consideración que las publicaciones se pueden hacer desde el más absoluto anonimato, ¿es realmente posible? Se puede debatir, contraponer ideas, etc con quien no es identificable y, por ende, no se hace responsable de lo que dice...¿pero qué pasa con los otros? ¿Cómo pueden incidir en los internautas poco avezados? Esta posibilidad, ¿no podría ser el origen de "arrastrar" a una masa de internautas crédulos y poco avezados? ¿No ocurre a ctualmente que "porque está en Internet, es cierto o verdadero? Además, en el mundo ¿en realidad todos tenemos acceso a Internet en forma cotidiana?... Creo que esto da mucho para pensar y debatir.


3.- Interacción y realización de trabajos colaborativos más allá de las distancias geográficas, las dificultades idiomáticas, las diferencias horarias, etc... Pero...¿quiénes colaboran y quiénes empantanan el trabajo con charlatanería sin fundamento? ¿Esto no obstaculiza el trabajo? No lo sé..., creo que, al menos lo retarda y provoca el gasto de energía innecesaria... Para pensarlo...


4.- Ensanchamiento de la brecha cultural y social acorde al nivel de alfabetización digital( en tendiendo por alfabetización digital no el "manejo de una P.C. y algo de Internet; sino de acceder, filtrar, administrar, integrar, editar contenidos, etc . En un futuro cercano, ¿quiénes tendrán acceso a trabajos mejor remunerados? ¿quiénes pueden capacitarse y ser alfabetos digitales? ¿En todo el mundo ocurre lo mismo? Pienso que no, por lo cual deduzco que, por ahora, la realidad indicaría que la alfabetización digital profunda de algunos, el simple manejo de la P.C y del acceso a cuentas de Internet en otros que terminarína realizando inconscientemente trabajos no remunerados y el analfabetismo digital de muchos, ensancharía notablemente la brecha ya existente...


Podríamos seguir buscando y sin duda hallaríamos mil desventajas. Pero de algo no cabe duda alguna, la propia historia de la Humanidad debiera enseñarnos algo: NINGUNA TECNOLOGÍA PER SE ES BUENA O MALA, SOMOS LOS HOMBRES QUIENES AL UTILIZARLAS LAS EMPLEAMOS PARA EL BIEN O NO...


Entonces, he aquí el verdaero desafío de esta generación y, particularmente de padres y docentes:¿Seremos capaces de educar personas alfabetizados digitalmente en forma profunda y de esa manera contribuir a la democratización, a cerrar brechas, acercar ideas y opiniones, favorecer el intercambio y respetar al otro? Pienso que muchos estamos anónimamente luchando para eso... Tal vez de modo erróneo pero estamos intentanto cambiar el curso de la historia. Quizás sea "naif", pero pienso que de no ser así no estaría escribiendo esto, no te hallarías leyendo estas reflexiones, no estaríamos estudiando, pensando, discutiendo...


¿No lo crees? Me gustaría conocer tu opinión y, tal vez seguir pensando juntos.


Graciela